Si al nombrar las cosas, al apalabrarlas, las creamos,
tal vez haciendo una retrospectiva, una crónica del desastre;
un recuento de los daños, contando hacia atrás en el tiempo y en mi edad,
logremos deconstruir mi vida.
Des-haciendo lo hecho y des-armándolo todo pieza por pieza,
reduciéndome en tamaño y dimensión hasta llegar a ese punto;
ese patético, nauseabundo, vacío,
irrelevante y siempre maldito momento de la concepción...
Para entonces impedirlo.
Volviendo reversible esta vida.
1 comentario:
¿Y quién limpiará todo eso?
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