martes, mayo 04, 2010

autistearse

no pude esconderme por mucho màs tiempo.


llevaba dìas sin querer ver a nadie màs que la madre y ese resbaladizo -pero tan arraigado- amante al que pomposamente llamo "novio".


ensimismada, sumida en mis pensamientos,
quise -quiero- estar a solas con ella,
contigo-conmigo, para mirarla
mirarte-mirarme.


necesitaba -necesito-,
un tiempo desde hace tiempo
para sentarme a hablar seriamente conmigo.

pero me he dado cuenta
que la terapia del espejo funciona:

al hablar con mis amigos y con èl,
encuentro màs de mì misma
que estando sola.

No hay comentarios.: